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El bosque de los suicidios

Caminaba cojo, desnudo..  con la soga en la mano derecha, sin dejar de mirar a la dulce maldita oscuridad que atormenta mi alma ¿acaso merezco este sufrir? No les basta con mirar mi rostro tajante y grotesco; enfurecido por haber nacido tan vil y feo, ante los ojos de los hombres, su expectativa de belleza, honor y gloria me repugnan; no es mi cuerpo digno de sus golpes y rencillas, es merecido escupir mi comida y mis ropas; sino que también excrementan mis sueños flojos cuando cae el dulce maldito sol; estupida la noche que reposa en la luna como cuartada en la pista de mis ojos putrefacto, maldito el ocaso que no merezco ver, dulce malnacido esprecto, hasta mi reflejo es razón de agobiantes días. he empezado a romper mi torso y los dedos tallando madera frente a los riachuelos, destrozando mis huesos, para recibir sus grandezas. Malnacidos mortales que suplican mi nombre para no perderse en el bosque de penumbras, terribles monstruos y bestias de la noche

Dulce maldita oscuridad que atormenta mi alma ¿acaso merezco este sufrir? No les basta con mirar mi rostro tajante y grotesco; enfurecido por haber nacido tan vil y feo, ante los ojos de los hombres.. Retumba en mi mente trastornada, ellos rodean sin piedad su expectativa de belleza, ellos, las bestias, ignorantes. Supliquen con el chasquido de sus dientes, no es sencillo reír con tanta tempestad en mi cuello, evitando la gravedad para poder volar, la interacción con mi cuerpo es fúnebre, que lástima esta decisión, porque antes que caiga la noche ya me habré suicidado... Autor: Andrea s

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Ver como su cuerpo se estremece, sus ojos se pierden y su respiración se hace mas forzosa. Me gusta jugar con el ritmo y la velocidad, que mis dedos dancen en su entre pierna, mientras mi boca explora su piel, juguetea con sus pechos, dando pequeños mordiscos, sutiles pero apasionados. Me gusta arrancarle gritos y una que otra palabra sucia. Me gusta que se despoje de todo prejuicio y sea quien desea ser todo el tiempo. Me gusta que entre la lujuria y la pasión me desgarre, que se haga mas frecuente su respiración, que arda la piel y justo en el éxtasis del momento, llegue al clímax cortando con un grito. Un grito diferente, uno que es mas silencio. Como si muriera momentáneamente y despertara con una sonrisa, una completamente sincera. Me encanta masturbar a una mujer, por que cuando acaba, significa que apenas empieza lo mejor. No estoy hablando de sexo señores, hablo de esa complicidad, esa intimidad que solo se consigue con la confianza mutua de hacerse el amor... Autor: Anó...

Poema Amor Verdadero de William Shakespeare

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Reconocimiento Literario a La Sra. Iholanda

María Iholanda Rondón María Iholanda Rondón nació en  Mérida ,  Venezuela  en  1968 . Es una  escritora   abogada  y especialista en  política internacional . Fue directora y fundadora de la  Biblioteca José Vicente Nucete  (Mérida, Venezuela) dedicada preferentemente a libros antiguos o ediciones especiales. Actualmente vive en la isla de  La Palma , provincia de  Santa Cruz de Tenerife ,  Canarias . Fue ganadora de la mención de honor en el 4to concurso de poesía  Universidad de Los Andes  con "Veinte cantos de amor y de dolor" en 1992. Reconocimientos Ganadora en el 1er concurso de cuentos cortos de editorial parnaso  Granada ,  España , 2005 con "La tía que llora, la tía que reza y el papá que regresa", cuento enmarcado dentro del realismo mágico latinoamericano. Ganadora del concurso de cuentos Alfonsina Storny, editorial Pegaso,  Argentina  en 2003 con el cuen...