lentamente Caes mientras mis lagrimas caen de alegría y melancolía,
tropiezas y te levantas mientras te empujo en este abismo y te brindo la mano nuevamente, Escápate de mi prisión, y prepárate para la muerte anunciada que caerá por la sonrisa de tu pálido rostro. espérame y derramare gotas de sangre en el vaso de oro frente a mi pequeño cementerio de hombres degollados por mis labios de color azul con rasgos rojizos.
Mírame si la energía de tus imperativos ojos me hacen feliz y disfrutando de tu compañía mientras mueres reconfortare lo que quedo de nuestro amor..
Autor: Andrea S.
Ver como su cuerpo se estremece, sus ojos se pierden y su respiración se hace mas forzosa. Me gusta jugar con el ritmo y la velocidad, que mis dedos dancen en su entre pierna, mientras mi boca explora su piel, juguetea con sus pechos, dando pequeños mordiscos, sutiles pero apasionados. Me gusta arrancarle gritos y una que otra palabra sucia. Me gusta que se despoje de todo prejuicio y sea quien desea ser todo el tiempo. Me gusta que entre la lujuria y la pasión me desgarre, que se haga mas frecuente su respiración, que arda la piel y justo en el éxtasis del momento, llegue al clímax cortando con un grito. Un grito diferente, uno que es mas silencio. Como si muriera momentáneamente y despertara con una sonrisa, una completamente sincera. Me encanta masturbar a una mujer, por que cuando acaba, significa que apenas empieza lo mejor. No estoy hablando de sexo señores, hablo de esa complicidad, esa intimidad que solo se consigue con la confianza mutua de hacerse el amor... Autor: Anó
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